HISTORIA SOBRE EL PROYECTO 

En febrero de 2019, se llevó a cabo un proyecto transformador en la Comuna Mandari Panga, ubicada en la región de Tiputini, una zona rural donde el acceso a agua potable representaba un desafío diario para las familias. Durante años, estas comunidades enfrentaron problemas de salud derivados del consumo de agua contaminada, lo que afectaba gravemente la calidad de vida de los habitantes, especialmente de los niños, quienes eran los más vulnerables a enfermedades relacionadas con el agua.

En este contexto, PRO2AGUA decidió intervenir para cambiar la realidad de estas familias. Gracias a su experiencia en la implementación de sistemas de filtrado de agua, se logró entregar 115 sistemas de filtrado a las familias de la comuna, garantizando acceso a agua limpia y segura por primera vez.

La implementación de este proyecto fue posible gracias al know-how de PRO2AGUA en el manejo de sistemas de filtrado y su capacidad logística para llegar a estas comunidades remotas. Desde la planificación hasta la entrega, el proyecto se ejecutó de manera eficiente, asegurando que cada familia recibiera un sistema adaptado a sus necesidades, lo que permitió reducir de manera significativa las enfermedades transmitidas por el agua y mejorar la salud y bienestar de toda la comunidad.

La intervención de PRO2AGUA no solo mejoró las condiciones de salud de las familias de la Comuna Mandari Panga, sino que también abrió nuevas oportunidades para el desarrollo de los niños y niñas, quienes ahora tienen mejores perspectivas de crecimiento y desarrollo. El proyecto representó un cambio fundamental para estas familias, quienes finalmente pudieron acceder a un recurso vital como es el agua potable.

Este proyecto es un testimonio del impacto positivo que puede tener la acción conjunta y bien coordinada, donde la experiencia técnica y la capacidad logística se alinean para transformar la vida de miles de personas. La historia de la Comuna Mandari Panga nos recuerda que, con esfuerzos como este, es posible lograr un futuro más saludable y próspero para las comunidades más vulnerables.

Aún quedan muchas comunidades por atender, pero proyectos como el de Tiputini son un ejemplo claro de que, con dedicación y trabajo en equipo, es posible cambiar realidades y garantizar un futuro mejor para todos.